Un grito silencioso en la noche de Teherán, lanzado por una mujer desde una azotea tras las elecciones presidenciales iraníes y retratado por el fotógrafo italiano Pietro Masturzo, es el protagonista de la Foto del Año 2009, elegida hoy por el jurado del World Press Photo.
El máximo galardón de fotoperiodismo del mundo ha ido a parar a "From the rooftops of Tehran" (Desde los tejados de Teherán), que ilustra uno de los grandes eventos informativos del año pasado: las protestas tras los comicios que tuvieron lugar en junio en Irán.
La instantánea captura el coraje de tres mujeres iraníes, alzadas sobre una azotea cuando todos los edificios a su alrededor guardan silencio y comienzan a encender las luces, y fue tomada por Masturzo (Nápoles, 1980) cuando se encontraba bajo arresto.
La imagen laureada como Foto del Año forma parte de una serie dedicada a las tensas noches que siguieron a las polémicas elecciones, y que a su vez, ha obtenido el primer premio en la categoría de historias "Gente en las Noticias".
La serie relata cómo las protestas que tuvieron lugar en las calles de Teherán durante el día continuaban al caer el sol desde los tejados, azoteas o balcones de algunas casas de la capital iraní.
La Foto del Año "muestra el comienzo de algo, el principio de una gran historia", según dijo el presidente del jurado, Ayperi Karabuda, en declaraciones recogidas en la web del certamen.
En ella laten "un poderoso sentido de atmósfera, tensión y miedo", al tiempo que "calma y quietud", según destacó otro miembro del jurado, Kate Edwards.
Esto se refleja en la tenue iluminación, lo estático del escenario y la actitud de las tres protagonistas: una de ellas está sentada, otra, borrosa, apoya sus manos en la cornisa, mientras que la tercera mujer parece lanzar gritos al aire con las manos en torno a su boca.
"Buscábamos una imagen capaz de atraer, llevar más adentro y hacer pensar más, que no sólo mostrara lo que ya sabemos, sino que exigiera más de nuestra parte", añadió Edwards.
Masturzo tomó la instantánea una semana después de las elecciones presidenciales en Irán, país al que "corrió" al oír la agitación social que se estaba produciendo, según explicó por teléfono a Michiel Munneke, director del certamen.
La imagen se fraguó una noche en la que el fotógrafo comenzó a oír voces "que parecían venir de los tejados de las casas".
Alguien le explicó que los gritos eran la continuación de las manifestaciones y violentos enfrentamientos que tenían lugar en las calles durante el día, y, de algún modo, "una reproducción" de lo que sucedió durante la Revolución Islámica de 1979.
"Yo estaba en peligro, porque estaba bajo arresto, pero las personas que gritaban eran las que en primer lugar tenían miedo y estaban en peligro", relata el italiano, que desde 2007 colabora con diversas agencias de prensa gráfica.
El fotógrafo decidió entonces retratar la escena "para que la historia fuera contada", pero sin mostrar claramente los rostros de las mujeres, y así se lo prometió a las protagonistas.
"Para mí, ésa era la única forma de tomar las fotos", afirma el italiano, que recibió la noticia del premio con un "no me lo puedo creer, no tengo palabras".
Masturzo recibirá el galardón durante una ceremonia que tendrá lugar el próximo 2 de mayo en la capital holandesa, así como una dotación de 10.000 euros y un lote de material fotográfico digital de última generación.
El jurado premió los trabajos de 63 fotógrafos de 23 nacionalidades en 10 categorías, entre ellos el argentino Walter Astrada, el brasileño Daniel Kfouri, el chileno Carlos Villalón, la ecuatoriana Karla Gachet, el mexicano Guillermo Arias y la peruana Gihan Tubbeh.
Entre los premiados en la 53 edición del certamen no hay ningún reportero gráfico español.
Las instantáneas ganadoras fueron elegidas de entre las más de 100.000 presentadas por casi 6.000 fotógrafos, una cifra récord de participación en el certamen.
|