Por primera vez, vemos el maltrato desde el punto de vista de quien no lo ha contado nunca, los hombres, dice en la carta de presentación de "¿No querías saber por qué las maltratan? Por nada", película documental cuyo título recoge la cita textual de uno de los maltratadores entrevistados.
La película, que se estrena hoy salas comerciales, en los cines Maldà, y se podrá ver en principio hasta el próximo 29 de abril, refleja las conclusiones de la autora, la antropóloga Mercedes Fernández Martorell, sobre la lacra de la violencia machista después de acudir a cerca de "700 juicios" y haber realizado "entrevistas en profundidad a 30 hombres" condenados por violencia machista.
Fernández ha dicho a Efe que pretende con su filme apelar al compromiso individual del espectador "a través de la capacidad de tener crítica viendo lo que dicen los hombres", ya que los actores que lo interpretan "reproducen exactamente" las palabras de los maltratadores entrevistados, en ocasiones, durante más de cinco horas.
Como en la novela de Javier Cercas "Soldados de Salamina", el documental se narra además desde el punto de vista de la investigadora y de su colaboradora, y refleja su experiencia al acercarse al objeto de su estudio.
Desde que anunció su proyecto de investigación antropológica, que contó con una ayuda del Ministerio de Ciencia e Innovación, Fernández Martorell ha recorrido la geografía española y ha matizado tesis como la de que hay que considerar a los maltratadores como "víctimas de sí mismos" que, desgajadas, han sido malinterpretadas.
"Como seres humanos, tenemos que construir nuestro significado social, necesidad que pasa por aprender unas pautas de comportamiento", dice.
La raíz del problema estriba en que los maltratadores son "hombres muy débiles desde el punto de vista emocional e intelectual", que no saben reaccionar ante el desajuste entre las pautas de comportamiento que aprendieron y la realidad social que les rodea.
Por eso, desde su punto de vista, los hombres que maltratan son "personas que viven en un estado de dependencia terrible de la mujer para sentirse verdaderamente hombres y son víctimas de esa dependencia social y emocional".
La experta señala que estos hombres son a menudo influidos por su círculo social más próximo y celebra que el Ministerio de Igualdad haya cambiado el enfoque y puesto el énfasis en sus últimas campañas en el entorno del maltratador.
Para Fernández Martorell, las pautas de comportamiento aprendidas impiden a algunas mujeres cortar por lo sano una relación tóxica: "He presenciado para mi desgracia cómo muchas mujeres retiran la denuncia" y "entran en una especie de vorágine", ya que "en realidad estos hombres suelen querer a su pareja, ella lo sabe, y ella suele querer a su pareja".
"La pregunta es: ¿por qué se crea una situación de dependencia tan terrible y no se abandona algo que es pernicioso, que es insano? Por las ideas que tienes sobre ti mismo", afirma Fernández Martorell.
La antropóloga concluye que "no es fácil cambiar una tradición milenaria de pautas de comportamiento y relación" que se vuelven perversas y constituyen la raíz del problema.
Para cambiar esas pautas, Fernández Martorell considera que el documental, en particular, así como la presencia en los medios de la condena de la violencia machista, en general, son un herramienta necesaria para avanzar en la solución del problema, porque en nuestra sociedad "no está establecido convencionalmente que la violencia entre sexos sea algo malo".
Para estimular la capacidad de crítica del espectador, Fernández Martorell ha querido además reflejar aspectos de la compleja realidad del maltrato que han suscitado polémica: "Al Ministerio de Igualdad no le gustó mucho el documental porque aparece una abogada diciendo algo que en aquel momento me dijeron algunos abogados, y es que las mujeres utilizan la ley para atacar a los hombres".